- Caritas era como una familia que había perdido. Me sentí vista, aceptada y valorada. Además, adquirí una valiosa experiencia que llevaré conmigo en el futuro.   

Esto nos cuenta Reem (31) sobre la época en la que era voluntaria Caritas su centro de recursos en Oslo.

Remi nació en Siria. Desde pequeña le gustó y se interesó por la escritura. Cuando de repente tuvo que huir de Siria como periodista recién titulada en 2015 debido a la guerra y los disturbios, finalmente terminó en Trøndelag. El viaje hasta allí fue largo y desafiante. En Trøndelag aprendió poco a poco noruego y se convirtió en pasante en el periódico local.  

En 2019, Reem llegó a Oslo. Estaba desempleada y se sentía muy vacía. Por lo tanto, Reem decidió comenzar como voluntaria en Caritas y eso cambió su vida.

- Al final del día, siempre estuve orgullosa de mí misma y muy feliz de poder contribuir, dice Reem.

Como voluntaria, pudo probar varias tareas y se le dieron cada vez más responsabilidades. Conoció a personas vulnerables que habían pasado por mucho. Todos vinieron con diferentes historias y antecedentes, y de diferentes situaciones. Pero todos tenían el mismo objetivo: recibir ayuda sin condena. Querían a alguien que pudiera entender su situación.

 - Conocí a personas que sólo querían hablar con alguien y que querían que alguien escuchara su historia, recuerda . 

Reem recuerda su época como voluntario en Caritas con alegría y gratitud.

 – Caritas Era como una familia que había perdido. Me sentí vista, aceptada y valorada. Además, adquirí una valiosa experiencia que llevaré conmigo en el futuro.   

Reem está ahora en su último año del curso de profesiones sanitarias y tiene una pasantía en el Hospital Ullevål. Su sueño sigue siendo poder ganarse la vida escribiendo textos, como periodista y como autora. Un día, espera que el sueño se haga realidad.

(Foto: Erik Waatland)